martes, 13 de diciembre de 2011
Opuestos Compuestos
Gritar, gritar tan fuerte hasta que pienses que te explotan los pulmones. Hacerlo tantas veces hasta quedarte sin aliento y caer rendidos. Saborear el piti de después como si fuera el último cigarro del mundo.
No tenemos remedio.. Hemos pecado demasiadas veces pero cada vez es mejor que la otra. Simplemente somos opuestos compuestos. Somos diminutas partículas que acaban juntas cuando no deberían estarlo, dejando todo lo demás apartado. Somos como una carga magnética creada por el universo, dos polos que se atraen, y cuando estamos juntos, podemos llegar a ser indestructibles.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
los polos opuestos que se atraen son en realidad muchísmo más complicados de encontrar de lo que parece...
ResponderEliminarMe quedo con "Simplemente somos opuestos compuestos". Enorme. Sí, esta entrada me ha gustado. Intensa.
ResponderEliminarBesos, te seguiré de cerca.
Por cierto, gracias por tu huella.
Muchas gracias por tu comentario.
ResponderEliminarEsta historia me resulta familiar, me recuerda a las veces que he hecho cosas que disfrutaba al máximo y de la cual me sentía enganchada, pero sabía que no era el camino correcto. Que todo eso podía acabar mal, o simplemente acabar, pero aun así persistía.
Acabas de empezar este blog pero veo cosas en común contigo. Yo tampoco me considero buena escritora y no pretendo serlo, pero siento la necesidad de escribir todo aquello que me pasa. También soy admiradora de la fotografía, de ese "to me, you are PERFECT" de Love actually, de Mi vecino Totoro, que no se por dónde leí que las niñas están muertas, de Tim Burton y su Big Bish y, como no, de mi adorable Audrey Hepburn.
Te sigo a partir de ya, espero que compartamos muchas cosas en estos mundillos.
Un saludo!